
El Moño Blanco / No es cristiano vengarse
Podríamos pensar que Dios nunca nos perdonará por malgastar los talentos que nos dio. Pero su misericordia y amor son infinitos y siempre está esperándonos.
Podríamos pensar que Dios nunca nos perdonará por malgastar los talentos que nos dio. Pero su misericordia y amor son infinitos y siempre está esperándonos.
La misericordia de Dios siempre está presente en nuestras vidas, cualquiera que haya sido nuestra historia. “Está en nosotros el seguir el buen camino”, dice.
Aunque se cierra la Puerta Santa, la verdadera Puerta de la Misericordia, que es el Corazón de Cristo, permanece siempre abierta para nosotros, dice.
Tal vez queda el sentimiento de no haberlo aprovechado del todo. Pero la clausura del Año Santo no es el final, sino que significa un punto de partida.
El Papa Francisco, en la última audiencia del Año Jubilar, reflexionó sobre una de las obras de misericordia: sufrir con paciencia los defectos del prójimo.
A punto de finalizar el Año Santo, el Cardenal Oswald Gracias cruza la Puerta Santa y realiza dos obras de misericordia para ganar la indulgencia plenaria.
El Papa Francisco dijo que la migración no es un fenómeno actual cuya solución no reside en la construcción de muros, sino en la solidaridad.
Se pregunta el Papa: ¿Una persona que no es misericordiosa es perfecta? Y responde enfáticamente: ¡No! El camino a la santidad es de amor.
El papa Francisco reflexionó sobre su reciente viaje a Georgia y Azerbaiyán, desde el punto de vista ecuménico e interreligioso.
“Nuestros ánimos están consternados por los tremendos actos de violencia que desde hace demasiado tiempo se están cometiendo contra ciudadanos inocentes”.
Con la puesta en escena de 2 parábolas en versión moderna, catequistas de la Arquidiócesis de Karachi, Pakistán, aterrizan la misericordia en lo cotidiano.
Por segunda ocasión, en menos de una semana, el Papa Francisco hace alusión a la violencia que se vive en México, y pide cantar “La Guadalupana” por México.