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Imagen del Sagrado Corazón de Jesús

Mes del Sagrado Corazón de Jesús

La Iglesia celebra la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús el viernes posterior al segundo domingo de Pentecostés.

 

La Iglesia dedica el mes de junio a la devoción del Sagrado Corazón de Jesús para la veneración, respeto e imitación del amor generoso y fiel del Hijo de Dios por toda la humanidad.

En este mes, la Iglesia exhorta a los fieles a demostrarle a Jesús, con obras, cuánto se le ama, con el propósito de corresponder al sacrificio que realizó por amor a los hombres al entregarse a la muerte en el madero de la cruz, así como el hecho de que continúa entre la humanidad en la Sagrada Eucaristía y en su Palabra de vida eterna.

 

Devoción al Sagrado Corazón de Jesús

 

Según ACI Prensa el origen de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús se remonta al siglo XI cuando los cristianos piadosos meditaban sobre sus cinco llagas.

En 1670 el sacerdote Jean Eudes celebró la primera fiesta del Sagrado Corazón de Jesús.

Pero se le atribuye a santa Margarita María de Alacoque, una religiosa de la Orden de la Visitación de la Virgen María, como la mensajera del Sagrado Corazón de Jesús, pues es conocida por haber recibido varias apariciones del Hijo de Dios.

En una de ellas, el 16 de junio de 1675, Jesús se le apareció y le mostró su corazón rodeado de llamas, coronado de espinas, con una herida abierta de la cual brotaba sangre y del interior salía una cruz.

Se dice que la santa francesa escuchó decir a Jesús: “He aquí el corazón que tanto ha amado a los hombres, y en cambio, de la mayor parte de los hombres recibo ingratitud, irreverencia y desprecio”.

En una de las apariciones, Margarita María dio a conocer que Jesús deseaba ser honrado bajo la figura del corazón de carne. Asimismo, exhortaba a los fieles a acudir al sacramento de la Eucaristía y la práctica de la hora santa. 

 

México, consagrado al Corazón de Jesús

 

Nuestro país ha sido consagrado dos veces al Sagrado Corazón de Jesús: la primera vez fue el 11 de octubre de 1924, durante el Primer Congreso Eucarístico Nacional que tuvo lugar en la Catedral Metropolitana; la segunda, se realizó en el marco de la visita a México de las reliquias de Santa Margarita María Alacoque, en la que se leyó un mensaje del papa Benedicto XVI.

En el evento que se llevó a cabo en el Cerro del Cubilete, un representante del entonces Sumo Pontífice, invitó a los presentes a “la construcción de una sociedad cada vez más impregnada de los auténticos valores evangélicos”.

México es uno de los 16 países consagrados al Sagrado Corazón de Jesús. 

 

 

Con información de ACI Prensa y Catholic.net

 

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