
Vivamos la misericordia en familia
Es necesario que nuestros hijos sepan que tenemos un Padre amoroso que nos cuida siempre y que está atento a nuestras peticiones.
Es necesario que nuestros hijos sepan que tenemos un Padre amoroso que nos cuida siempre y que está atento a nuestras peticiones.
La Semana Santa, la semana mayor, es la época del año que nos abre la puerta a la fiesta mayor que tenemos los católicos: La Pascua.
El papa Francisco nos invita a imitar el ejemplo de Simeón y Ana, estos «peregrinos de la esperanza» que tienen ojos límpidos capaces de ver más allá de las apariencias
El amor es el que da fuerza para superar muchos obstáculos.
Al inicio de la Cuaresma, volvemos a asombrarnos al contemplar el misterio de nuestra salvación.
Este tiempo de cuaresma es el tiempo por excelencia para trabajar en la conversión de nuestro corazón y tenemos una oportunidad de oro para lograr cambiar lo que nos pesa.
Este Año Jubilar ha de ser un nuevo inicio para todos, afirma el Papa Francisco, un tiempo donde todo es “replanteado dentro del sueño de Dios”.
La cuaresma es el tiempo de perdonar las ofensas, de ofrecer disculpas, de corregir los errores y sobre todo de tener abierto el corazón para recibir las gracias de parte de Dios.
Hay que preguntarnos si realmente reconocemos la autoridad única de Jesús, o si reconocemos que Él es nuestro salvador y nadie más lo es.
Se dice que la esperanza es como el sol, pues arroja todas las sombras detrás de nosotros.
La compasión es como un puente para establecer la unión con diferentes tradiciones religiosas.
Dios nos ha creado para amar y nuestro amor lo reflejará si respetamos a todos, independientemente de su raza, credo u otro aspecto.