Monseñor Justo Mullor, nos cuenta en entrevista cómo conoció a Juan XXIII y a Juan Pablo II, sus experiencias y un valioso mensaje a los católicos.

Una luz de esperanza. Nunca es demasiado tarde
Secundemos al Papa pidiendo que no falte la esperanza, en especial, en quienes estén desanimados, fracasados y sin ver claro el futuro, incluso en la última hora de su vida.