
Día de la Candelaria, la luz con la que el Niño Jesús ilumina al mundo
Vestir dignamente al Niño Dios y llevarlo a bendecir a la iglesia es un signo de alabanza y confianza en el Señor representado en una tierna figura infantil.
Vestir dignamente al Niño Dios y llevarlo a bendecir a la iglesia es un signo de alabanza y confianza en el Señor representado en una tierna figura infantil.
Sorprende que los habitantes de Jerusalén, estando tan cerca de Belén, no hayan ido a ver a Jesús; pero sorprende más que hoy esté solo en cada templo.
Muestras de fe, amor y adoración al Niño Dios, y un camino de conversión, son algunas reflexiones que nos ofrecen los Papas sobre los Reyes Magos.
El Papa dice que la Navidad, además de acercarnos al Niño-Dios, a María y José, es salir en busca del “próximo” necesitado, abandonado, triste o solo.
Si olvidamos que Jesús es el centro de la Navidad, nuestra fiesta se torna hipócrita y sin sentido, en donde todos fingimos ser felices una vez al año.