
Un gran regalo el Cielo. Un salto en la fe
La alegría no está en la biblioteca, encerrada, sino que hay que descubrirla en nuestro diálogo con los demás, donde compartimos la alegría que hemos recibido.

La alegría no está en la biblioteca, encerrada, sino que hay que descubrirla en nuestro diálogo con los demás, donde compartimos la alegría que hemos recibido.

Ciertamente no podemos resolver todos los problemas del mundo, pero ello no nos excusa para no hacer nada.

“El mayor mal es la falta de amor y caridad, la terrible indiferencia hacia nuestro vecino que vive al lado de la calle, asaltado por la explotación, corrupción, pobreza y enfermedad”: Santa Madre Teresa de Calcuta.

El amor de Dios es infinitamente superior a nuestros pensamientos e imaginaciones. Nuestros pensamientos son limitados y Dios es infinito.

Cuando obramos con amor, estamos permitiendo que otros descubran el amor divino y se abran a su amor.

El domingo es un regalo que Dios nos hace a su pueblo, y por eso, la Iglesia lo protege con un mandamiento.

Los tiempos son los tiempos y la doctrina de la fe es la doctrina del Evangelio.

Jesús no quiere sólo buenos propósitos, busca que vivamos nuestra fe y amor de modo concreto, con hechos de adoración y de caridad.

El silencio litúrgico es el símbolo de la presencia y la acción del Espíritu Santo que anima toda la acción celebrativa.

La película Tengamos la fiesta en paz está hecha para reforzar la unión familiar y recordarnos que San José, la Virgen María y Jesús nos acompañan.

los errores más nocivos de Lutero han sido ampliamente difundidos a través de múltiples revoluciones y movimientos que han ido infiltrando nuestras más importantes instituciones.

Con la necesaria formación litúrgica seguiremos asombrándonos en cada celebración.