
El Obispo debe ser amigo de Cristo
Todos los cristianos están llamados a ser santos; y la santidad no se logra sin una sincera, coherente, profunda y viva amistad con Cristo.

Todos los cristianos están llamados a ser santos; y la santidad no se logra sin una sincera, coherente, profunda y viva amistad con Cristo.

“Simplemente fue coherente. Nunca engañó, nunca mintió, nunca chicaneó”, comentó el ahora Papa Francisco sobre Juan Pablo II.