La canonización de los Juanes está vinculada al Concilio Vaticano II, convocado por Juan XXIII y llevado en curso por Juan Pablo II.

Comienza la Pascua. La fuente de la alegría
Para alimentar esta alegría, podemos seguir el ejemplo de aquellas mujeres: ir al encuentro del Resucitado, ya que Él es la fuente de una alegría que nunca se agota.