El Papa Francisco nos llama a no dejar de lado a los necesitados: “Señor, ayúdanos a salir al encuentro de los demás, a servir a los más débiles”.

Comienza la Pascua. La fuente de la alegría
Para alimentar esta alegría, podemos seguir el ejemplo de aquellas mujeres: ir al encuentro del Resucitado, ya que Él es la fuente de una alegría que nunca se agota.