Virtudes y vicios (18). Ser como semáforos
No es inteligente decir lo primero que se ocurre, así sin más. Al pensar, se evita faltar a la caridad, a la verdad o a la justicia.
No es inteligente decir lo primero que se ocurre, así sin más. Al pensar, se evita faltar a la caridad, a la verdad o a la justicia.
Aristóteles decía que el rasgo distintivo del hombre prudente es el ser capaz de deliberar y de juzgar de una manera conveniente.
En estos tiempos turbios, es necesario animar a los católicos y a todos los cristianos del mundo a reafirmar su amor por la civilización cristiana occidental.
Por sentido común (prudencia, diría Aristóteles) es fundamental el respeto de libertad religiosa y libertad de expresión, y no deben ser lastimados.
La sociedad ‘espera mucho del poder judicial {…} que sea su compromiso el no defraudar sus expectativas legítimas’, dijo el Papa a magistrados.