Papa: No dejemos que nos quiten la alegría de ser discípulos de Jesús
“Es feo para la Iglesia cuando los pastores se convierten en príncipes, lejos de la gente, de los más pobres. Ese no es el espíritu de Jesús”, dice.
“Es feo para la Iglesia cuando los pastores se convierten en príncipes, lejos de la gente, de los más pobres. Ese no es el espíritu de Jesús”, dice.
Llama a los presentes a ser pastores como el profeta Ezequiel muestra a Dios, que sale en busca de la oveja perdida y cura a la que lo necesita.
Sorprende que los habitantes de Jerusalén, estando tan cerca de Belén, no hayan ido a ver a Jesús; pero sorprende más que hoy esté solo en cada templo.