
Fin de año, tiempo de ver la misericordia de Dios en nuestra familia
Es bueno que nosotros aprendamos a reconocer lo que Dios hace con nosotros en lo personal y en lo familiar.
Es bueno que nosotros aprendamos a reconocer lo que Dios hace con nosotros en lo personal y en lo familiar.
Como creyentes, vivimos a contrapelo del mundo; si no luchamos, ¡nos lleva la corriente! Debemos nadar río arriba, proponernos fortalecer algo cada día.
Aunque este año haya carencias y estrecheces económicas, si crecemos en el amor, nos va a ir mejor, absolutamente a todos, este 2016.